Y cada año se presentan 13 mil casos, de los
cuales 12% día están en etapas avanzadas, lo que convierte a esta enfermedad en la segunda causa de muerte por cáncer en población femenina, por ello la necesidad de tener terapias dirigidas que brinden calidad y expectativa de vida a las pacientes.
De acuerdo con la Dra. Elvira Gómez, Oncóloga médica, “el 60% de los casos de cáncer cervicouterino ocurren entre los 25 y 64 años, es decir en etapas productivas, y en edad fértil.
Gómez agregó que “el cáncer cérvicouterino además de poderse prevenir, cuando es detectado en etapas tempranas puede ser curable.
El problema es que muchas pacientes no tienen acceso a un adecuado sistema de salud adecuado, y la mayoría de las pacientes presentan altos niveles de pobreza, no tienen información ni herramientas que les permitan conocer o detectar oportunamente la enfermedad.
Por ello es que la especialista indicó que es preciso que la salud llegue a todas las zonas, y refirió que no deben perderse vidas cuando existe una terapia blanco o dirigida la cual está indicada “para el tratamiento de cáncer de cuello uterino persistente, recurrente o metastásico, en combinación con quimioterapia”.
Estudios clínicos ya comprobaron que la combinación de los medicamentos da a las pacientes con cáncer cerviouterino en etapas recurrente o persistente una expectativa de vida de 3.7 meses, comparado con las pacientes que recibieron quimioterapia sola.
El beneficio se observa, incluso cuando la enfermedad recurrente es local o en pelvis y previamente tratado con radioterapia.
La especialista aseguró que en México “el cáncer cervicouterino se considera una prioridad del gobierno. Las actividades de prevención, diagnóstico precoz y tratamiento están actualmente en vigor. Desafortunadamente, no se habían presentado, hasta hoy, nuevas opciones de tratamiento para los pacientes, en etapas avanzadas.
Estadísticas nacionales demuestran que las entidades con mayor mortalidad son: Colima (23.9), Morelos (16.1), Veracruz (16.0), Chiapas (15.9) y Oaxaca (15.8).
La Dra. Elvira Gómez aseguró que “desde 1999, para pacientes con cáncer cervicouterino localmente avanzado se estableció como tratamiento, la combinación con radioterapia y quimioterapia (quimio-radiación) es recomendado como estándar de tratamiento”.
Agregó que “para una paciente en etapa inicial, el tratamiento con cirugía alcanza un éxito terapéutico superior al 90%, en tanto que para etapas localmente avanzadas, el tratamiento con quimioterapia y radioterapia alcanza un éxito terapéutico del 51 al 80%. Para etapas avanzadas, el tratamiento con cirugía radical, la quimioterapia y radioterapia, así como la quimioterapia paliativa, posee probabilidades de éxito terapéutico de sólo 15 al 20%”.
El tratamiento blanco, por el momento sólo se encuentra disponible en el sector privado y en el ISSSTE, sin embargo, está en proceso para incluir la recomendación también en IMSS y otros sectores públicos, pues no se trata de un medicamento nuevo, sino uno que ya se usa para el cáncer mamario, desde hace algunos años, y cuya patente pertenece a Roche por un par de años más.
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